Los caminos de la guerra y el amor
La vida de Mariano Melgar cuenta con los atributos que forjan las grandes historias: juventud, amores locos, giros en la trama y muerte heroica. Quizás por todo eso, pasados más de 200 años de su fallecimiento, su obra y biografía siguen despertando la curiosidad de aficionados y académicos.
Nacido en Arequipa, en 1790, se sabe poco de su infancia. Cuenta la mitología que aprendió a leer a los 3 años y que antes de los 8 ya dominaba el latín. Imposible saberlo a ciencia cierta, pero lo que sí es seguro es que destacó en los estudios en el Seminario Conciliar de San Jerónimo, donde cursó estudios de Filosofía, Teología y Gramática y se dedicó a la traducción de Virgilio.
Melgar, como era costumbre en la época, estaba destinado a seguir la carrera eclesiástica, pero eligió un camino todavía más pedregoso: el del amor y el de la guerra. Se enamoró perdidamente de la famosa Melisa de sus poemas, cuyo verdadero nombre fue Manuelita Paredes, y luego de María Santos Corrales, de 13 años, mejor conocida poéticamente como Silvia…
“Todo mi afecto puse en una ingrata, / Y ella inconstante me llegó a olvidar. /
Si así, si así se trata / Un afecto sincero, / Amor, amor no quiero / No quiero más amar”.
El amor hizo que abandonara la religión y escribiera torturados poemas sobre la soledad, la frustración y el abandono propios del amor no correspondido. Eligió muchas formas de hacerlo. Melgar escribió odas, sonetos, elegías, epigramas, cartas y, especialmente, yaravíes o composiciones cortas casi siempre emparentadas con el lamento amoroso.
A la religión, finalmente, renunció por amor y a la guerra se entregó por el mismo motivo. El poeta, atravesado por una sensibilidad a flor de piel y con el corazón herido, se enroló en las tropas patriotas bajo la dirección de los hermanos Angulo y Mateo Pumacahua. Melgar, con más entusiasmo que municiones, cercado por el ejército realista en la batalla de Umachiri, en Puno, intentó huir pero fue apresado, juzgado y fusilado al día siguiente. Tenía 24 años. Hasta la fecha el destino de sus restos sigue siendo un misterio.
Poeta y precursor de la Independencia, la figura de Mariano Melgar se asocia a la literatura prerromántica, pero también a la de un joven apasionado y culto que encontró en la poesía y la causa patriótica una manera de trascender en el tiempo.
Mariano Melgar Valdivieso (Arequipa, 1790 - Umachiri, 1815)